Agua y Drenaje de Monterrey sigue enfrentando la alta morosidad en el servicio de agua. Tras el fracaso del plan de descuentos implementado en octubre, el organismo anunció nuevas restricciones en el suministro de agua a los morosos.
No obstante, las críticas hacia los cobros irregulares, como el “cobro expediente“, y la falta de transparencia sobre el desfogue de la presa El Cuchillo, siguen siendo puntos de controversia.
Agua y Drenaje Implementa Medidas Restrictivas
El director de Agua y Drenaje, Juan Ignacio Barragán, informó que, debido a la falta de regularización por parte de los usuarios morosos, se tomarán medidas más drásticas a partir del 1 de febrero.
El nuevo sistema consistirá en la instalación de aparatos restrictivos que limitarán el suministro a solo 200 litros de agua por día, en un horario de 3 a 7 de la mañana. Esta medida afectará a los aproximadamente 185 mil usuarios morosos.
Barragán destacó que los usuarios que no se regularicen antes del 31 de enero se verán obligados a recibir solo el mínimo vital de agua, estipulado por la ley como derecho humano.
La medida, de acuerdo con AyD, busca reducir la deuda de los usuarios morosos. Sin embargo, muchos usuarios ya han manifestado su preocupación por la falta de claridad sobre cómo se implementará este sistema y cómo afectará la calidad de vida de quienes no pueden regularizarse; además, a esto se suma el descontento por el “cobro expediente”.
El “Cobro Expediente” De Agua Y Drenaje, Una Polémica Aún Vigente
Uno de los puntos más polémicos del programa de Agua y Drenaje ha sido el denominado “cobro expediente”, una cuota que ha existido desde la creación del organismo en 1954.
El inconveniente de este cobro ha sido que se adjudicó por trabajos del organismo en vía pública, es decir, en propiedad municipal, pero el cobro fue cargado a los contribuyentes como si hubiera sido un servicio hecho en la propiedad privada.
Barragán defendió el cobro, asegurando que es una práctica legítima y necesaria para el funcionamiento del servicio.
Sin embargo, muchas personas consideran que este cobro es innecesario y no justificado, especialmente en un contexto donde el servicio de agua es constantemente criticado por su calidad y los altos costos que deben asumir los usuarios.
La falta de transparencia en los criterios para aplicar esta cuota genera desconfianza entre los ciudadanos.
Desfogue De La Presa El Cuchillo Y Falta De Explicación
Otro tema que ha generado inconformidad con el organismo es el reciente desfogue de 134 millones de metros cúbicos de agua de la Presa El Cuchillo.
Aunque Barragán fue cuestionado sobre si este desfogue fue destinado para cubrir la deuda de agua con Estados Unidos, el director admitió que no sabe si esa fue la razón. Lo único que confirmó es que ya se cerró la compuerta, pero no proporcionó más detalles sobre el uso de los recursos liberados.
Esta falta de explicación ha generado inquietud entre la ciudadanía, que teme que los recursos hídricos de la región se estén utilizando sin claridad y sin que se informe adecuadamente sobre el impacto que esto podría tener en el abastecimiento de agua para los habitantes de Nuevo León.
La gestión de los recursos hídricos es un tema sensible y, ante la escasez de agua, los ciudadanos exigen mayor transparencia y responsabilidad en la administración de estos recursos.
Una Crisis Hídrica Que No Parece Tener Fin
La morosidad, el cobro de cuotas cuestionadas y la falta de claridad sobre la gestión del agua siguen siendo desafíos importantes para los ciudadanos de Monterrey. Los organismo responsables de la gestión del agua no parecen dar solución suficiente ni adecuada a la situación.
Si bien AyD había implementado descuentos en octubre, la instalación de dispositivos restrictivos ahora desalienta la confianza de los ciudadanos en las autoridades.
Con el nuevo sistema de restricciones que entra en vigor en febrero, el organismo buscará reducir la morosidad, pero es evidente que se necesita una mayor claridad y una mejor comunicación con los ciudadanos.
El acceso al agua es un derecho fundamental, y la población exige respuestas claras y acciones más eficaces para garantizar que todos tengan acceso a este recurso vital.